La peligrosa mezcla de agua, cigarrillos y aguardiente


En las películas resulta rutinario que venga un forajido y zas!, le rompa una botella de vidrio en la cabeza a otro.  Generalmente, el tipo que ha recibido el golpe queda noqueado, pero al rato se levanta, se sacude los cristales de la ropa y del cabello, dice... "bueno, aquí no ha pasado nada..." .  Se recupera y como dijo "Viruta"... Se va...  Sin embargo, en el mundo real, las cosas no son tan rápidas!..  
Según un equipo de investigadores de la Universidad de Berna, en Suiza, ser golpeado en la cabeza con una botella de vidrio es requetepeligroso.  En serio, es muy peligroso!  
Aunque el peligro que entraña es diferente según si la botella está llena o vacía.  Un físico calculó la cantidad de energía que tiene un botellazo en la cabeza y sacó dos conclusiones:

a.  Las botellas llenas se rompen a una energía de impacto de 30 Joules
b.  Las botellas vacías a 40 Joules. 

Estas energías de rotura sobrepasan el umbral de fractura mínimo del neurocráneo humano. Por lo tanto, las botellas de vidrio, pueden fracturar el cráneo humano y por ello son instrumentos peligrosos en una pelea física.
Además, golpearse repetidamente la cabeza no es bueno para nuestro cerebro. Que se lo digan a los futbolistas y a los árbitros a quienes les lanzan botellazos de vez en cuando!
Esta introducción da lugar a una historia contada por uno de los amigos de la banda, en una de las tantas chupi-peñas nocturnas.  
Sucedió que el tipo, invita a la chica que estaba cortejando para encontrarse en un restaurante, pues estaban peleados y él quería hacer las paces.  La chica le dijo primero que no, porque tenía otro compromiso, pero dijo que iba a tratar de ir.
Llegó la noche del encuentro.  Nuestro amigo, llegó al restaurante y solicitó un vaso de agua mientras esperaba a su dama.  Pasaron los minutos, y ella nada que llegaba.  Por cierto, debo recordarle amigo lector que en esos tiempos, pues no habían celulares, así que no podían llamarse.  Nuestro amigo, fue objeto de malas miradas, pues no había ordenado nada, solo pidió un vaso de agua para esperarla, y después de esperar tanto, nunca llegó.  Por último, lo sacaron del local, porque ya lo iban a cerrar.
Ya en la calle, le compró a un vendedor ambulante un cigarrillo, el mismo que encendió y fumó mientras caminaba sin rumbo, pensando qué mismo hacer...  Muy fastidiado, divisó una licorera abierta y se compró una botella de alcohol barata.  Era una botella de aguardiente, la misma que destapó y se la bebió lentamente, tapita a tapita, en uno de los bancos del oscuro parque en el cual estaba sentado, pensando y pensando... sin definir qué mismo sucedería con ese amor que quería recuperar...
Con el viento de la noche, y con la botella media consumida, él decidió ir a buscarla a su casa...  Aún era antes de la medianoche y podía llamarla para conversar un ratito... de pronto, sucedió algo..  algún imprevisto..  o alguna emergencia...   Así que se encaminó a la casa de ella...
Antes de llamarla, se percató de que las luces de la sala estaban encendidas...  Mirando fijamente por los cristales de la ventana, pudo ver que ella se deshacía en besos en los brazos de otro sujeto...  Nuestro sorprendido amigo, sintió que todo se desplomó...  Ella lo había plantado por estar en brazos de otro... Y en su misma casa!...
Sin saber que más podía hacer, quiso retirarse, pero el orgullo se lo impidió:  Tocó la puerta...  Ella se acercó a abrir, y al hacerlo, quedó muy sorprendida y empezó a tartamudear, sin saber qué decir...
El solo se la quedó mirando...
En eso, llegó el tipo con el cual estaba ella en la sala, a preguntar que pasaba, y comenzó a preguntarle a él insistentemente que qué deseaba, y a ella, que quién era ese tipo!...  Se puso muy exigente.
El climax de esta discusión se detuvo cuando la botella de aguardiente se reventó sobre el cráneo del preguntón,..
Todos tres salieron perdiendo... El agredido, quedó ensangrentado, en el piso, cabeza rota...  A ella, los padres la repelaron y le prohibieron andar con amiguitos..  Y a nuestro amigo, le costó una semana de prisión, por mezclar tres cosas en un asunto sentimental:  AGUA, CIGARRILLOS Y AGUARDIENTE!.
Cuando este amigo salió nos contó sobre este suceso, y a mí me gustó tanto la historia... me causó tanta risa, que decidí hacer una canción, la misma que ha estado encarpetada desde 1994!...  
Un saludo y la canción de Los Igualados, "Agua, cigarrillos y aguardiente", para el gran Galo Towsend!

por Nacho Almeida

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