No jodan... la música es libre!...

sábado, 12 de febrero de 2011

El blog de Los Igualados salió en internet

Con la idea en marcha y con los primeros compendios para hacerlos conocer, Nacho quiso crear un sitio web, similar al que hiciera Dender Valente para el reencuentro 2010.

Analizando mejor las cosas, en Google diseñó un blog básico para promover día tras día cada actividad musical que estuviera haciendo, es decir, contar cada novedad, relacionar canciones con su historia, o hacerlas conocer a quienes se interesen en leerlas.

En el blog, los lectores y visitantes podrían interactuar comentando, viendo fotos, videos y escuchando las canciones. El blog ha estado en línea desde el 30 de marzo del 2011 con su misma url. Su dirección en internet es

www.nachoylosigualados.blogspot.com

Aunque en el blog se publicaban artículos musicales, éstos tuvieron muy poca aceptación. Luego se publicaron artículos relacionados a los títulos de las canciones que se grababan, y esto tampoco fue nada llamativo. Los pocos visitantes que entraban al blog, no comentaban nada.


Poco a poco el blog fue adquiriendo visitantes. Se promocionaba en las redes personales de Nacho y Los Igualados en facebook todo lo que se estaba haciendo y los amigos, tal vez por curiosidad o camaradería ingresaban a los enlaces, pero casi no comentaban.

En comparación con la página del Reencuentro RIP, su resultado era mucho menor. Ésta alcanzó los 1000 visitantes en sólo 3 meses. y Los Igualados en 9 meses terminaron con menos de 2000 visitantes.

Por fin, en los inicios del 2012 comenzaron a comentar los artículos publicados pero curiosamente muchos eran de personas desconocidas, blogeros de otros países que habían llegado al blog gracias a los buscadores.

Hubieron unos falsos Igualados

Nacho les daba pistas falsas con nombres extraños a todos los que preguntaban por los otros integrantes.  Pero quiénes eran esos "Igualados"?


Estos son los casos de Luis Enrique Gil (a quien Nacho lo describía como Luise Gil, o sea LO HICE GIL...) quien supuestamente tocaba la guitarra, los teclados y hacía coros; el caso del bajista Esteban Niera (o "Este Man Ni Era") y también el del baterista Carlos del Toro, a quien todos le decían Nito, (Nito Carlos del Toro, o sea "Ni Tocar los del Toro!").
La banda no tuvo más integrantes, pero muchos creyeron que sí.  Todos aquellos nombres fueron ficticios, así como los supuestos igualados.. los músicos de esa banda.
Ninguno de esos igualados existía, pero por lo visto, las personas se creyeron casi todo lo que suelen ver por las redes sociales.

jueves, 13 de enero de 2011

Una canción para igualarnos

A inicios del año 2014, y ante la buena acogida de los visitantes con respecto a la Igualdad Social, decidieron que la banda musical debe ser real. 

Es decir, debe de tocar en vivo, debe de tener integrantes y hacer espectáculo como en los viejos tiempos.

Es dificil mantener una banda, pero eso ha sido siempre así. Alba sugirió que se le diera la oportunidad de tocar a quien realmente quisiera integrar la banda.

Escribió una canción en la cual se invite a cualquiera a formar parte de la banda. Pensando en todas las personas que habían intentado hacer música con él, recordó a su amigo Alejo Rojas, quien en los inicios del grupo decía que era muy dificil conseguir los instrumentos para hacer música. Nacho tomó la música y las mismas palabras de Alejo para hacer una nueva versión de la canción "Hermanos del rock", ahora titulada "Igual a dos".

La canción se subió en las redes y tuvo muy buena acogida. Sin músicos para hacer los coros, Nacho le pidió a su hijo Jude, que le ayude con el coro de la canción, lo cual lo hizo con mucho agrado. La canción tenía una sola idea:

Todos somos igualados!

viernes, 7 de enero de 2011

La larga caminata hacia la música

La mayoría de nosotros espera siempre obtener logros preparándose todo el tiempo.  Es como estudiar una carrera, sin practicar su oficio mientras la cursamos.
Desde 1987, cuando un amigo me prestó su guitarra eléctrica, sentí que, una de las cosas que obligadamente tenía que hacer en esta vida, era formar una banda musical.
Desde luego, no estoy alardeando de ser exitoso, ni de tener una super-banda, ni esas cosas, pero lo que he vivido durante todo este tiempo, gracias a esa idea, ha sido y es, una experiencia increíble!.. Han sido miles de aventuras, amigos, presentaciones, canciones, y siempre hay una anécdota para compartir.Mis primeros amigos en la música fueron como yo.  Por suerte, tuvimos la misma inclinación y el mismo deseo loco de juventud por hacer lo que más nos gustaba: tocar un instrumento y hacernos escuchar.
Yo me escapaba en las noches con la guitarra de mi papá para encontrarme con ellos en algún lugar y amanecernos canturreando en un parque, rodeados de amigos y curiosos, que siempre pedían más y más canciones.
Escuchar el aplauso de los amigos era grandioso!...  Claro que a veces, tocaba escuchar a alguien que a esa hora de la noche, abría su ventana y nos decía:

- Oigan, por qué no se van para otro lado?

Sabíamos que era muy dificil alcanzar una posición artística exitosa, sin tener instrumentos, ni recursos, y sobretodo, cuando nos faltó el apoyo de nuestros familiares, quienes siempre criticaron lo que hacíamos..  Incluso nos negaban por teléfono cuando queríamos encontrarnos para ensayar.
En fin. No nos dimos por vencidos y nos sorprendían las cosas que alcanzábamos.  La historia es larga, pero todo comienza cuando, con la guitarra en mano, iniciábamos a caminar.
Si viviste en las ciudadelas del sur de Guayaquil, seguramente pasamos por tu casa, o nos viste por la calle... en toda esa joda, al caminar, adoptamos una curiosa forma "idéntica" de hacerlo: UNO TRAS OTRO CON EL MISMO PASO.  Era algo que causaba risa, y lo hacíamos por donde fuésemos caminando, incluso entre el tráfico, cruzando por el paso de seguridad cuando el semáforo se ponía rojo.  Recorríamos las calles, subíamos y bajábamos veredas, escaleras.  Caminamos tanto de una ciudadela a otra:  desde la ciudadela del Seguro, la Ronda, la Villamil, Las Acacias, La Huancavilca, La Saiba, Los Esteros, La Pradera, El Centenario Sur, La Sopeña, La 9 de Octubre, hasta los bloques de La Valdivia.  Y lo hacíamos siempre, porque era el mejor momento para intercambiar opiniones, discutir ciertas cosas, e incluso bromear. 
Llegamos a caminar por las calles de la ciudad de Milagro, y por las vías del tren de Durán, en donde también nos conocieron.
Una noche, mientras caminábamos de esta forma por Mapasingue con las guitarras en mano, unos tipos que chupaban en una esquina nos compararon con los Beatles de la portada del LP Abbey Road caminando sobre una zona de seguridad.  En esa foto, ellos iban uno tras otro y a cierta distancia.  Nosotros íbamos sincronizados uno tras otros.
De las muchas canciones de los Beatles, a una de ellas en el 2006 le adapté letra en español y en ella detallé lo que ocurría cuando caminábamos con el grupo.
Caminar era un momento mágico en el que sin darnos cuenta, progresábamos.  Cada paso en el camino era un avance a una nueva presentación, a una nueva oportunidad de dar a conocer lo que hacíamos.
Por andar metido en este caminar, dejé de lado muchas cosas en esos años.  Me alejé de mis amigos de barrio, dejé a mi chica, descuidé en parte mis estudios, y tuve que cargar con las opiniones de mis padres.  No sabía lo que iba a conseguir; pero ahora sé que no era la meta lo que me mantuvo allí.  Era todo el camino que recorri y las experiencias que en él encontré.
Para nosotros, cualquier vereda o parque, se convertía en escenario.  El público llegaba poco a poco apenas uno empezaba a cantar con la guitarra y luego, sonaba el aplauso de todos quienes escucharon el mensaje de nuestras canciones.
Caminando, nos presentamos en fiestas, en hoteles, en restaurantes, en eventos, en un stand en la Feria de Durán, en colegios, en iglesias, en la universidad, en callejones para un día de las Madres, para las fiestas de Guayaquil, en parques, en Milagro, en el teatro del Centro Cívico, y en casas de muchos amigos y conocidos.  Tantos lugares!.
Nos han llovido monedas, nos han abucheado, pero también nos han aplaudido mucho, nos han felicitado, se han tomado fotos con nosotros y en una presentación en la calle nos llovió papel picado desde un balcón.   Y todo esto es constancia de que aquel día escucharon nuestra canción.
Hoy, con el paso del tiempo, cada uno de aquellos amigos camina por su lado. Pero para mí el camino aún sigue. Ahora camino solo. Siempre quedarán en mi memoria esos magníficos momentos ofrecidos por la música.
No encontramos música en ninguna academia, ni en ningún libro.  La encontramos en la calle. La encontramos caminando.

domingo, 12 de diciembre de 2010

Ansiedad





Ansiedad de tenerte en mis brazos, 
Musitando palabras de amor
Ansiedad de tener tus encantos, 
Y en la boca volverte a besar

Ansiedad de tenerte en mis brazos, 
Musitando palabras de amor
Ansiedad de tener tus encantos, 
Y en la boca volverte a besar

Tal vez estés llorando mi pensamiento
Mis lágrimas son perlas que caen al mar
Y el eco adormecido, de este lamento 
Hace que estés presente en mí soñar
Quizás estés llorando al recordarme
Y estreches mi retrato con frenesí
Y hasta tu oído llegue, la melodía salvaje
Y el eco de la pena de estar sin ti

Ansiedad de tenerte en mis brazos, 
Musitando palabras de amor
Ansiedad de tener tus encantos, 
Y en la boca volverte a besar

Tal vez estés llorando mi pensamiento
Mis lágrimas son perlas que caen al mar
Y el eco adormecido, de este lamento 
Hace que estés presente en mí soñar
Quizás estés llorando al recordarme
Y estreches mi retrato con frenesí
Y hasta tu oído llegue, la melodía salvaje
Y el eco de la pena de estar sin ti.
Y el eco de la pena de estar sin ti.
Y el eco de la pena de estar sin ti.

domingo, 14 de noviembre de 2010

domingo, 31 de octubre de 2010

Igualdad y justicia

Mucha gente piensa que la igualdad entre personas conlleva la justicia entre ellos. Ser tratados igualmente y ser tratados justamente puede parecer que es exactamente lo mismo, pero no es así.

Ya lo dijo Aristóteles en uno de sus muchos postulados:  
La justicia pasa por tratar de igual forma a personas que son iguales, y tratar de forma desigual a personas que son desiguales. Cuando estos preceptos no se cumplen es cuando aparecen las injusticias.
Esto quiere decir, ni más ni menos, que cada persona debe ser tratada teniendo en cuenta sus particularidades para que, a demás de ser igualitarios, seamos también justos.

La prueba más grande de esto la tenemos en las diferentes leyes que parecen “favorecer” a determinados grupos o sectores. 

Mucha gente piensa que es injusto que, a determinadas personas, el Estado les subvencione el alquiler, que paguen menos impuestos, que reciban becas de estudio o que haya puestos de trabajo reservados para gente con sus condiciones.

La situación de estos grupos, por diversas circunstancias, parte de un desventaja económica, social o física que les hace imposible competir en igualdad de condiciones. Es aquí donde se hace patente que para que haya justicia.  En muchos casos, no podemos, ni debemos, ser tratados de la misma forma. 

Una imagen vale más que mil palabras y en este caso no podía ser más cierto. La siguiente ilustración refleja perfectamente la diferencia entre igualdad y justicia y por qué una está supeditada a la otra. ¿Qué opinas tú?