La noche que vinieron los ovnis a Guayaquil

En 1991, cuando éramos muy muchachos y estábamos en la novelería de formar una banda musical, salíamos a tocar guitarra en algunos de los parques de la ciudadelas del sur de Guayaquil. 

Fue cuando nos aconteció algo que probablemente a más de uno le pudo haber sucedido en esta ciudad, porque es muy frecuente en el mes de enero, hacer avistamientos de objetos voladores no identificados.  Basta con buscar videos aficionados en Youtube, escribiendo "Ovni en Guayaquil" y se asombrarán de ver la gran cantidad de capturas hechas. Lo raro es que siempre son avistamientos hechos por personas comunes y corrientes, porque los expertos y entendidos que están en las ramas pertinentes a estas áreas, no los ven ni por televisión.  

Aquella noche estuvimos canturreando en un parque.  Llegó alguno por allí que se acercó a escuchar y a cantar con nosotros.  Luego llegó otro, y asi se armó un grupo mediano.  

Uno de ellos sacó una botella de buen trago.  Bueno, de trago, nomás.   La peña musical se dio casi hasta las tres de la mañana, la botella poco a poco se fue consumiendo y de pronto, comenzó a lloviznar.  Algunos se fueron, pero nosotros seguimos en la movida, pensando que pronto escamparía.   Pero no fue así.  Incluso hubo un apagón causado por la lluvia a esa hora. 

Estábamos con los efectos del trago y no se sabe en qué momento, alcanzó a divisar tres extrañas luces entre la oscuridad de la noche. que se acercaban lentamente hacia el lugar donde ellos estaban, haciendo un zumbido espantoso.  Una luz era roja, otra blanca y la otra azul.  Cuando se percataron de que estaban ya muy cerca, alguien gritó:

- Ché' tu maaaarrrr!!...

Y salieron todos corriendo.

Nosotros quisimos escapar de allí y no pudimos ni movernos. Las luces de los cigarrillos no eran suficientes para ver lo que ocurría.  Por más que intentamos huir de aquel lugar no pudimos hacerlo. 

A la mañana siguiente, y gracias al Cielo, con un terrible dolor de cabeza, nos dimos cuenta de que la policía nos tenía rescatados en uno de los retenes del sur.

Contamos esta historia, en nuestros hogares, pero nadie... absolutamente nadie, quiso creernos.

Al parecer, Alejo Rojas, quien tocaba el bajo, en aquellos tiempos, quedo trastornado.  Tuvo pesadillas o comunicaciones de otro orden con estos seres intergalácticos, pues según él, le dieron la orden de difundir que nuevos ovnis vendrían a Guayaquil a darnos la vuelta de tiempo en tiempo, y que esto tenía que hacerlo por medio de una canción.

Alejo creó un estribillo musical.  Me explicó lo que estaba sucediendo, y además agregó que si no lo hacía, lo habían amenazado con mandarlo a la Central de Riesgos y subir el precio del encebollado de pescado!  Trabajamos juntos en esta canción y pasamos cerca de 15 minutos sin poder dormir!.   Fue algo terrible!.

Al fin con el trabajo terminado, Gran Gaby manifestó que los seres del espacio, eran sus amigos de años, y que debíamos reservar la canción para un momento especial.  Los seres del espacio han cumplido con lo que le dijeron a Alejo. 

Desde esa fecha, año tras año, son más y más los avistamientos hechos en Guayaquil.  La canción de Alejo permaneció guardada en la vieja carpeta hasta el año 2010, la fecha del reencuentro, se grabó en  su voz, pero no tuvo la acogida que esperábamos.  ¿Qué más pruebas querían para creer que los ovnis venían desde 1991 a Guayaquil?

Y tras esta insólita historia, en la cual, Alejo quien me conoce y sabe que es una joda, hemos hecho un remake de esta vieja canción, con la voz de Jude, quien, como muchos otros, considera que "Ovnis a Guayaquil" es una de las mejores, que hemos hecho de muchachos. 

Un fuerte abrazo a la distancia y un saludo para Alejandro "el loquillo" Rojas, por la idea del "Ovni de Guayaquil".