Mientras los chicos continuaban en los ensayos, una tarde Nacho recibe la visita de Gabriel Encalada en casa y conversan del nuevo nombre de banda, de la idea de volver a tocar en vivo y de lo que se estaba haciendo con los muchachos para completarla.
También de la libertad que ahora se tiene para estar en ella sin obligaciones ni dependencias de ningún tipo y de lo que se seguía subiendo canciones al internet.
A Gran Gaby le gustó la idea y decidió participar. Fue un gran apoyo, pues con él ya se podía planear, hablar y hacer mucho de música.
